Tratar los parásitos en perros será una tarea fácil si realizas la prevención cada tres o cuatro meses proporcionándole a tu mascota una rutina de salud que le mantendrá saludable y con un buen estado de los órganos internos.
Los parásitos son fáciles de tratar (en caso de que los contraiga) pudiéndose eliminar en las primeras fases. Algún tipo de parásitos son realmente complicados y es necesario diagnosticarlos pronto ya que pueden dañar a los órganos más importantes como el corazón o el hígado. Aunque deberás saber que, realmente, existen dos tipos de parásitos, los externos y los internos, los externos como las garrapatas se adhieren a la piel del animal, son igualmente peligrosos, ya que mediante la absorción de la sangre podrán transmitirle infecciones al animal.
Éstas se tratan con pipetas así como peinando con cardas el cabello del animal pudiendo eliminarlas inmediatamente tras los paseos. En cuanto a los internos, la prevención y la eliminación de los mismos se tratarán con pastillas desparasitadoras, que se administran después de las comidas o antes. Se aplica un tratamiento de urgencia en el caso de que ya los tenga y si es tratamiento de prevención se creará una toma cada tres meses. Esto será de vital importancia ya que así se eliminará el riesgo de que puedan transmitirlo a las personas y a los niños que convivan con la mascota.
Podrás saber si tu mascota posee algún tipo de parásito cuando éste presente una dermatitis acusada en alguna parte del lomo, orejas o cabeza, cuando vomite durante varias veces (algunas veces con existencia de diarreas con presencias extrañas que confirmarían la existencia de larvas o pequeños gusanos o lombrices), cuando no tenga ganas de comer o veas que pierde peso en un estado de salud óptimo, cuando no se ve dolorido por nada.