Tanto la esterilización como la castración se encargan de evitar que los perros se puedan reproducir. Para llevar a cabo este proceso, se consigue por medio de la extirpación quirúrgica de los órganos sexuales que no se reproduzcan. En la hembras, este proceso de hace por medio de la extirpación de los ovarios y el útero y en los perros se le extirpan los testículos.
Además de para que no se reproduzcan, estos dos métodos cuentan con muchas más ventajas, ya que les dan grandes beneficios a los perros a nivel mental y una gran calidad de vida
Esta operación se debe hacer después de los primeros 6 meses de vida y antes de que pasen 5 años.
Cómo es la operación
Esta operación se lleva a cabo por veterinarios especializados y con anestesia general. Es un tipo de intervención que apenas da problemas y normalmente los perros se recuperan de forma rápida. Después de esta operación, se puede tener la certeza de que no se reproducirán.
La vasectomía y la ligadura de trompas
La vasectomía y la ligadura de trompas, también hacen posible que no exista fecundación, pero no hace que desaparezcan las glándulas reproductivas. Esto quiere decir que no es beneficio para el perro en casi ningún sentido, ya que sus instintos siguen presentes.
En el caso de las hembras, tampoco se tiene beneficios para la salud como el caso del cáncer de mamás o útero.
Los contraceptivos para perros
Si no quieres someter a tus perros a esta operación, existen en el mercado una inyecciones anticonceptivas para perros que hacen que la perra no se quede embarazada, pero tienen algunos efectos secundarios nocivos y además esto no conseguirá que la perra deje de estar en celo, solamente se asegura que no quede embarazada