Diagnosticar el embarazo de una perra puede resultar un tanto difícil el primer tiempo, sobre todo para aquellos propietarios que no tienen experiencia en los síntomas que se podrían presentar. La gestación en perros dura normalmente nueve semanas, aunque los cachorros pueden nacer un tiempo antes.
Las etapas del embarazo de una perra son similares a las que se producen en un embarazo humano. Las perras que atraviesan este período requieren un cuidado especial. A medida que el período avanza, también ocurrirá un cambio de las necesidades nutricionales y comenzará a tener limitaciones en sus movimientos.
Los embarazos caninos se dividen en cuatro etapas fundamentales:
- La primera dura aproximadamente tres semanas y generalmente no se muestran síntomas de embarazo. La perra puede llegar a mostrarse cansada o inapetente.
- La segunda etapa se extiende desde la cuarta hasta la sexta semana. En este período la perra probablemente suba de peso y los pezones comenzarán a crecer más de lo normal.
- En la tercer etapa ya se puede observar un aumento evidente en el crecimiento abdominal y el comienzo de la producción de leche. Esta fase se prolonga hasta la novena semana, cuando el parto es inminente.
- Cuando la perra se muestra inquieta y busca un lugar donde dar a luz, se encuentra en la etapa final. Un descenso brusco en la temperatura corporal es señal de que el parto se producirá en las próximas veinticuatro horas.