No abandonemos nunca a nuestro perro

La adopción de un perro implica una responsabilidad muy grande. Al tomar la decisión de tener una mascota debemos tener en cuenta que nos acompañará durante el tiempo que sea necesario, más allá de los inconvenientes que se presenten en la relación.

Puede ocurrir que ciertas circunstancias de la vida nos dificulten seguir manteniendo nuestro perro. Sin embargo, existen muchas maneras de evitar que este lazo se rompa. Uno de los casos más comunes lo constituye una mudanza a un lugar donde no se aceptan perros. La solución es muy sencilla: existen muchos otros sitios donde vivir, pero la relación con nuestro perro es irreemplazable.

Otro de los motivos por los cuales algunos propietarios renuncian a la tenencia de su mascota tiene que ver con su comportamiento u otros problemas de salud. Lo cierto es que se trata de problemas que deberíamos abordar con los correspondientes profesionales tanto en el caso de las mascotas como de cualquier humano integrante de la familia.

La llegada de un bebé puede generar la idea de querer suspender la relación con el perro que vive en nuestro hogar. Sin embargo, los perros y los niños pequeños pueden ser una excelente combinación siempre y cuando se maneje correctamente y bajo supervisión.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí