Si tienes una perra embarazada en tu hogar, debes saber que esta mascota necesitará ciertos cuidados durante el embarazo, en el momento del alumbramiento, y luego de haber tenido las crías. Las atenciones especiales dependerán del momento que se encuentre atravesando el animal.
En este caso lo que nos interesa es el momento del parto. Buscaremos un lugar para que se desarrolle este trabajo teniendo en cuenta ciertos aspectos: que sea tranquilo y con el menor tránsito de gente posible, que cuente con una buena iluminación durante todo el día, que sea sencillo de limpiar y por sobre todas las cosas, que sea acogedor y le asegure a la perra su comodidad.
El parto de una perra puede demorar desde un par de horas hasta dos días. El tiempo dependerá de cada animal en particular, así como otras cuestiones que podrán ir variando, como la cantidad de crías y la posición en se colocan para nacer. También pueden haber variaciones en el trabajo de parto dependiendo de la raza de perro de que se trate.
En el momento del parto propiamente dicho, los perritos irán naciendo de a uno por vez, envueltos en la placenta. La madre come una a una las placentas de todos sus cachorros. Normalmente la perra puede tener sus crías en el hogar donde se encuentra viviendo. Si por algún motivo notas que tu mascota luce sin energía o con algún síntoma fuera de lo normal, será conveniente que consultes a un veterinario sobre la manera en que puedes asistirla.
