Durante el destete se produce la reducción gradual de la dependencia de un cachorro a la leche materna. Generalmente este proceso comienza entre las tres o cuatro semanas de edad del cachorro y se da por terminado a las siete u ocho semanas. Siempre que exista la posibilidad, lo ideal es dejar al pequeño que viva este proceso de forma gradual. Caso contrario será en el caso de los perros huérfanos, los que deberán tener otro tipo de atenciones.
Para colaborar en el destete de los cachorros, se debe comenzar por separar a la madre de la camada durante algunas horas, aumentando cada vez más la frecuencia y duración. Durante el destete los cachorros comerán alimento especial para dicha etapa, remojados con agua tibia hasta formar una papilla.
Durante los primeros días los cachorros probablemente necesiten un estímulo para comer. Ayudaremos en este proceso y poco a poco le enseñaremos a comer de su propio recipiente. Nunca debe faltar agua fresca y limpia para los cachorros.
La madre también necesita algunos cuidados. La sobreproducción de leche puede ocasionar dolor en las glándulas mamarias y cierto sangrado. Es por ello que resulta importante hacer del destete un proceso gradual y sincronizado. Se deben pactar horarios de separación estrictos. De todos modos una consulta con el veterinario nunca está de más.
