Una buena alimentación es uno de los pilares fundamentales para que el perro esté sano. Lo importante en este tema es saber que el animal debe tener una dieta surtida, y el mejor alimento que puede comer es el balanceado, ya que en él se incluyen todos los nutrientes que necesita. Para saber cuál es el que se debe comprar, lo mejor es consultar con su veterinario de cabecera, quien además les aconsejará sobre la cantidad diaria que se les debe suministrar.
La regla más importante a seguir en cuanto a la alimentación del perro es que éste debe comer solo su comida y nunca comer sobras del almuerzo o cena de las personas que viven con él. No hay que acostumbrarse a convidarle comida de la que consume la familia, ya que probablemente luego no quiera comer su alimento, además de que siempre va a estar rondando la mesa pidiendo que le den algo.
¿Cómo alimentarlo?
Cuando es cachorro hay que dividirles la ración de alimento en tres comidas diarias, tratando de respetar siempre los mismos horarios. En los primeros meses de vida, el alimento balanceado que corresponde es el de cachorros. Cuando crece, se le debe dar de adulto. El paso de un alimento a otro debe ser una transición lenta y nunca brusca. Conviene mezclar de los dos alimentos primero para luego quedarse solo con el de adultos.
Ya en la adultez el perro puede comer dos veces al día. Además del alimento se le puede dar de vez en cuando algún hueso grande para roer. Con él se entretendrán por buen rato, con el beneficio adicional de estar cuidándoles la dentadura. Nunca se le deben dar huesos de pollo ya que se astillan y pueden clavárseles en la garganta o generarles problemas a la hora de hacer sus necesidades.
El agua fresca nunca debe faltarle, es responsabilidad del amo velar para que siempre su tazón tenga agua limpia.