El moquillo es una de las peores enfermedades para los perros y una de las que causa más muertes en ellos. Esta enfermedad es muy fácil de trasmitir de perro a perro, ya que se trasmite por el contacto entre un perro infectado y un perro sano.
Los cachorros de perro son mucho más propensos a tener este tipo de enfermedad, ya que sus pulmones no están completamente desarrollados, por eso los veterinarios recomiendan que se les vacune siempre antes de los 6 primeros meses.
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Síntomas del moquillo en perros
A los 4 días de haberse infectado un perro, se comienzan a encontrar síntomas, sobre todo en las vías respiratorias, ya que el perro comienza a tener muchos problemas para respirar y para comer.
En casos más avanzados, incluso empiezan a tener problemas en la piel.
Los síntomas son:
- Oculares: pus en los ojos, secreción ocular.
- Respiratorios: secreción nasal, tos, neumonía.
- Digestivos: falta de apetito, diarrea, vómitos.
- Cutáneos: encallecimiento de la nariz y almohadillas.
- Neurológicos: la fase terminal de la enfermedad ocurre cuando penetra el sistema nervioso, ocasionando síntomas más severos: fiebre, dolores musculares, tics, debilidad, convulsiones, ataques y parálisis.
No esperes para ver si el perro se va recuperando, desde que notes uno de los síntomas acude a tu médico.
Prevención del moquillo canino
No pongas a tu perro en peligro y vacúnalo cuanto antes.
La primera vacuna del moquillo, se pone al mes. No se debe sacar al perro a la calle sin ponerle esa vacuna. La siguiente vacuna se pone en el perro al cumplir el primer año de vida y después se pone la vacuna cada tres años. Las últimas vacunas son solamente de prevención.
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