Ya hemos hablado sobre la esterilización de las hembras caninas. En esta oportunidad haremos referencia a la castración de los machos, la cual se realiza mediante una intervención quirúrgica denominada “orquiectomía”. Dicha operación consiste en la extracción de ambos testículos.
La esterilización de los machos puede tener sus ventajas y sus desventajas. Lo primero que debes saber es que notarás un cambio en su comportamiento, convirtiéndose en un perro más tranquilo y sedentario. Ya no tendrá la necesidad constante de salir afuera, de escapar y pelear con otros de su especie.
Entre las ventajas que se pueden obtener con este tipo de intervención, se encuentra la prevención de ciertos tipos de enfermedades que tienen que ver con el órgano reproductor del canino. También se notará una reducción de las conductas agresivas que pudiera haber tenido, aunque esta modificación de las conductas irá acompañada por un correcto adiestramiento.
Si tuviéramos que mencionar una desventaja, sólo podemos hacer referencia a la cirugía misma. Pueden ocurrir complicaciones típicas como infecciones o hinchazones. Pero no se trata de una operación tan comprometida como la que se le practica a la hembra. Así que tranquilos, pueden castrar a sus perros machos con confianza.




