Un mal hábito que puede hacer que nuestro perro no sea tan gracioso como siempre es el momento en el que sufren Coprofagia. Este tipo de problemas se les da a los perros cuando comienzan a comerse sus propias heces.
Aunque en muchas otras especies de animales esto cumple una función – como por ejemplo cuando los conejos bebé se comen sus heces- la coprofagia no es algo que se debe dejar hacer a algunas especies. En el caso de los conejos, al comerse sus heces cuando son bebés reciben nutrientes de ellas.
Sin embargo en los perros no cuenta con algún tipo de ventaja y suele ser una visión bastante desagradable para sus dueños. Aunque es cierto que el hecho de que tu perro coma heces no le va a causar ningún, daño puede que el animal tenga parásitos y los ingiera sin querer.
Aunque en la mayoría de los perros, el hecho de que se coman sus propias heces no tienen ningún problema para su salud, puede que en algunos casos, en los que el perro tenga parásitos en su interior o en otros los que él los insectos hayan depositado huevos en él, si pueda ser perjudicial para la salud
En caso de que un perro coma heces de otro perro, esto puede hacer que su cuenta con algún tipo de enfermedad, como parvovirus, esta pase de un perro a otro por medio de las heces.
Las heces del gato
Sin embargo, cuando un perro come heces de un gato está consiguiendo una gran fuente de nutrientes que no podría conseguir de su propia comida; aunque debes asegurarte que el gato esté sano, ya que puede transferirse enfermedades.
Las causas más frecuente de coprofagia en los perros son:
- Cuando el perro quiere llamar la atención de sus dueños se come sus heces, ya que sabe que lo van a regañar
- Sientes que el sabor de sus heces es apetecible para ellos y les genera curiosidad su forma
- Tienes problemas de estómago y al hacer heces blancas que aun cuentan con nutrientes se las comen de nuevo para sacarles el máximo rendimiento. Esto es algo muy frecuente en los perros más pequeños.
- Otra de las razones va unida a la primera que hemos dado, ya que pasan mucho tiempo y se aburren. A veces se lo comen sin que nadie los vea por qué no se les dedica atención y otras lo hacen deliberamente delante de sus dueños.
- Cuando sufren ansiedad. Los perros con ansiedad comienzan a tener comportamientos muy raros.
- Cuando un perro sabe que ha defecado en el lugar en el que no debe, antes de que lo peleen se come sus heces.
- También suelen hacerlo los perros que no cuentan con la comida suficiente o cuando un perro nota que la alimentación no es la adecuada.
- Si tu perro lleva muchos años contigo y nunca lo ha hecho pero al llegar a su edad adulta lo comienza a hacer, es hora de acudir al veterinario con él para descartar problemas en el páncreas.
