Algunas veces, si has tenido un perro alguna vez en tu vida seguro habrás comprobado como si es de talla pequeña le habrá ladrado a otro perro de mucho mayor tamaño, debido al miedo y a la inseguridad en la diferencia de físico y fuerza. Esto es completamente normal, hasta cierto límite, puesto que te hará que te frenes a la hora de decidir si dejar al perro suelto o no, debido a que podría pelearse con el otro reafirmando así su valentía.
Es de vital importancia que controles y entrenes a tu mascota para que no le dé importancia al hecho de encontrarse con perros de un tamaño superior, para que no ladre de manera excesiva. El primer paso para evitar estos enfrentamientos será alejar la mirada de nuestro perro del objetivo, en este caso, el perro más grande, para que se distraiga y así provocar que no reaccione mal, al decirle un “¡No!” tajante cuando empiece a ladrar y tras un par de veces el perro comprenderá que está mal obrar de esa manera, por lo que verás como a medida que avanzan los días, este tipo de reacciones irán disminuyendo. Cuando tu perro te entienda dale un premio en forma de huesitos de gominolas para perros o todo tipo de golosinas aptas para ellos.
Está comprobado que al erradicar esta tendencia, siendo paciente y constante, lograrás efectos seguros y eficientes en el comportamiento de tu mascota. Otro consejo vital a tener en cuenta es que ellos actuarán según tu reacción corporal y mental, es decir si tú les proyectas nerviosismo, se agravará la situación. Sé tajante y cuidadoso, nunca acudiendo a métodos de entretenimiento agresivos y crearás un equipo totalmente armónico, porque los perros no son unos animales difíciles de entender. Tan solo tendrás que conocer las reacciones básicas de la psique canina y así poder entenderlos mejor aplicando el método que mejor se adecue al nivel de miedo de tu mascota.