Los perros utilizan su oído tanto para la sensación auditiva como para mantener cierto equilibrio. Se trata de un órgano muy sensible y de gran importancia para el animal. Algunas razas de perros son más propensas que otras a contraer sordera o sufrir otro tipo de afecciones auditivas.
Si nuestro perro estuviera teniendo un problema progresivo en su audición, lo importante es tratar de detectarlo a tiempo. Si la afección continuara avanzando sin aplicar ningún tratamiento, nuestra querida mascota podría llegar a sufrir una sordera total.
Uno de los modos más efectivos para notar este tipo de afecciones es prestar atención a la reacción del animal ante determinados estímulos. Si nuestro perro ya no reacciona de la misma manera ante ciertos ruidos, probablemente está perdiendo la audición.
Puedes acudir a diferentes tipos de sonidos para comprobar la respuesta de tu mascota. Por ejemplo podrías sacudir un manojo de llaves, al cual seguramente alguna vez llamó mucho la atención de tu perro. Ante cualquier síntoma sugerimos la pronta comunicación con un veterinario de confianza que pueda realizar los estudios pertinentes.
