En el post anterior ya os hablamos de cómo elegir a un perro para toda la vida, o al menos algunos de los pasos a seguir como ver el carácter del perro.
En este post seguiremos hablándote de qué cosas tener en encanta cuando hablamos de elegir un perro para toda la vida.
El sexo del perro es primordial, ya que rara vez se tiene un perro hembra para los casos en los que se busca un perro guardián. Dado que los perros son mucho más corpulentos se suelen elegir los machos para muchas cuestiones.
Además, las hembras son mucho más celosas y suelen pasar por cambios de ánimo mucho más seguido que los perros macho… lo que se vuelve un poco peligroso si tenemos niños en casa.
Sin embargo, si lo que se busca es compañía, una hembra es perfecta siempre y cuando no tenga que compartir su cariño con demasiadas personas. Las hembras son perros perfectos para ancianos o personas que viven solas mientras que los machos son mucho más afables en familia.
Otra de las cosas a tener en cuenta es la cantidad de tiempo que disponemos para pasar con el perro.
Que un perro sea muy grande no quiere decir que necesite mucho ejercicio., de hecho, los perros más grandes que existen suelen ser muy holgazanes como los San Bernardo que en vez de salir a pasear quieren quedarse un rato tomando fresco en la terraza… y luego tenemos a los caniches, que son muy enérgicos durante todo el día.
Tenía una caniche preciosa llamado Cleo, le encantaba que le tirase su juguete preferido y ella me lo traía de nuevo… tengo que deciros que se cansaba primero mi mano de lanzarlo que ella de buscarlo y traerlo.
Es muy importante que veamos que cantidad de tiempo disponemos.
En el proximo post, te vamos a hablar de cuáles son las razas de perros más adecuadas para cada ritmo de vida. ¡No te lo pierdas!